Capitulo 2 (almas perdidas)

Sebastián:


Siempre tenia que venir ayudarme, era bien cabezona.
Me había dicho viel que solo estaba dormida y no herida, o bueno solo un rasguño en su garganta, pero ella se había quedado dormida por el cansancio.
Me la lleve a mi habitación, la que tengo en el recinto le hable a su padre para que no se preocupara de ella, no le dije sobre el accidente hasta que ella le diga.
Como esta?- pregunto artemis
Solo esta dormida, pensé que era grave la herida pero viel la checo y dijo que solo estaba dormida.- le dije
Menos mal, debes de cuidarla bien o si no te matare.- exclamo artemis
Claro lo se.- respondí
Yo sabia su secreto, Gabriel era su hija lo supe por sus ojos grises como los de ella al igual que su cabello negro chino y con varias canas.
Eran tan diferentes por que así como ella se parecía a artemis se parece también mucho a su padre Xavier Rinlk hija de los 3 pero ella no lo sabia y yo no se lo diría.
Cuídala bien.- exclamo artemis antes de irse
Su herida solo era una línea roja se curaba muy bien con mi saliva, y también por que solo faltan 3 días para nuestro cambio.
Nuestro cambio lo haremos juntos y por eso estoy haciéndole una gran sorpresa.
Donde estoy?- pregunto somnolienta
Estas en mi habitación.- le respondí subiéndome a la cama para estar cerca de ella.
Por que les dijiste que no me hablaran?- pregunto irritada
Por lo mismo que has estado irritada y malhumorada.- respondí
Te amo Sebastián pero no me dejes afuera de las peleas por favor.- dijo Gabriel
Te prometo que ya no te voy a dejar fuera.- respondí con una mano arriba prometiendo
Como esta mi herida?.- pregunto
Sanando, no fue profunda así que no se te hará cicatriz.- le dije
Menos mal, ya no quiero mas cicatrices.- me dijo con un suspiro
A mi me gustan tus cicatrices.- respondí besando la que tenia en su cuello.
Aun así una mujer con cicatrices parece que la golpea su novio.- exclamo enojada
Esta bien, me han dicho que después del cambio tus cicatrices pueden borrarse.- le dije
Había hablado con artemis sobre ellos y también averiguamos muchas cosas sobre los mestizos.
Entonces se podrán ir?.- pregunto sorprendida
Si.- le dije
Entonces si me gusto la idea.- exclamo Gabriel feliz
Me gusta cuando sonríes.- le dije acariciando una mejilla
Se escucharon golpes en la puerta.
Adelante.- exclame
Lo siento chicos por interrumpir pero te llego otra carta Gabriel.- exclamo Andréu
Antes de que la agarrara Gabriel la agarre yo…
Dame Sebastián.- exclamo Gabriel
Ya no quiero mas cartas entendiste, que se pudran pero no quiero verte así otra vez.- le dije enojado
Será mejor que me vaya.- dijo Andréu y salio del cuarto
Es dirigida a mí, no tienes el derecho de leerla.- exclamo Gabriel enojada y levantada de la cama.
Ya no quiero que te levantes a media noche llorando, y gritando como lo has estado haciendo desde que llegaron estas cartas y luego no me dices de que son, ni de quien por que no me tienes confianza Gabriel?- pregunte arrodillandome a ella.
No puedo.- exclamo saliéndole una lagrima
No llores mi amor, por favor me duele cada vez que lloras.- respondí limpiándole la lagrima.
Ella callo de rodillas alado mió y me abrazo como si me estuviera yendo.
Son de la puerta.- me dijo con un llanto ahogado
La atraje más a mí.
Por que no me dijiste.- le dije
Tú me dijiste que era peligroso abrirla.- respondió
Puedo leerla?- pregunte
Adelante.- respondió
Empecé a leer la carta, mientras ella se acurrucaba más a mi pecho.
Querida Gabriel.
Necesitamos tu ayuda, han llegado cazadores a nuestro lado y han muerto
Demasiados de nosotros, necesitamos que vengas te lo pido de nuevo
Por favor.
Muchos seres están muriendo en vano.

J.

Quien es (J) .- pregunte confuso
No lo se, siempre me manda esa persona las cartas.- exclamo
Que es lo que sueñas?.- pregunte
Muerte, violaciones, peleas….- respondió en llanto
Calmada Gabriel, por que nunca me dijiste.- exclame enojado y abrazándola mas
Tenía miedo.- respondió
Miedo a que?.- pregunte
He soñado cosas que pienso que son en el futuro.- respondió mirándome a los ojos
Que has soñado?.- pregunte
Tu muerte.- respondió
Eso no va pasar Gabriel, te lo prometo nunca.- respondí dándole un beso en los labios.
No quiero perderte.- respondió besando mi cuello.
Y no me perderás lo prometo.- exclame
Se quedo dormida en mis brazos y la lleve a la cama, no quería moverme de su lado por sus pesadillas pero tenia que ir con artemis hablar sobre las cartas.
Cuando quería dejarla en la cama... ella dijo mi nombre con un suspiro.
Nunca te dejare Gabriel.- le dije en su oreja.
Estuve trabajando todo el DIA en la cama no quería dejar sola a Gabriel, hable con artemis por el comunicador y le mande la carta. Dijo Artemis que teníamos que arreglar una misión para ir al otro lado.
Yo no estaba de acuerdo con eso, pero me había dicho mi madre que sus hermanos estaban ahí.
Al día siguiente le prepare su desayuno, no había tenido pesadillas en toda la noche.
Buenos días.- le dije dándole un beso.
No será buena tarde?- pregunto sarcásticamente
Esta bien buena tardes, tienes hambre?.- pregunte
Mucha, que me preparaste?.- pregunto
Lo que te gusta, spaghetti con albóndigas.- respondí
Lo hiciste tu o te lo trajo Andréu?- pregunto
Esta bien, no quería dejarte sola así que le dije Andréu que te preparara esto.- respondí con las manos arriba de rendición
Me senté con ella y empezó a desayunar y darme a mí también en la boca, no podía comer mucho pero si me gustaba la comida.
Pregunta.- exclamo
Sabia que quería preguntarle algo, siempre sabia cuando quería hacerle una pregunta.
Dime como.- respondí
Tu no quería que fuera con ustedes al otro lado, así que me encerraste aquí hice todo lo posible por seguirte por que sabia lo que iba a ocurrir pero tu seguías terco que era a mi quien querían muerta, al día siguiente era nuestro cambio corrí lo mejor que pude a tu lado para ir contigo pero llegue tarde te habían matado, ellos no me querían a mi si no a ti.- respondió con lagrimas en los ojos.
Por que me quieren a mí?.- pregunte confuso
Tu sangre puede cambiar a los cazadores, solo tu tienes esa sangre que puede mezclarse con la de ellos.- respondió tímida
Quien me mata?.- pregunte
El mestizo .- respondió
A ti te quiere para el no es así y a mí para sus cazadores.- exclame enojado
Ya les has dicho a los demás verdad?, no quiero que vayas.- me dijo
Debo de ir.- le dije acariciando su mejilla
Por favor, si quieres vamos pero después de nuestro cambio solo faltan dos días Sebastián dos días.- exclamo nerviosa
Artemis quiere que nos vayamos hoy en la noche.- le dije
Ella se paro y corrió al pasillo, yo iba detrás de ella pero era mas rápida cuando estaba enojada, sabia que se dirigía a donde estaba artemis para reclamarle.
Llegamos al estudio y ahí estaba artemis leyendo un libro.
Gabriel lo agarro por la camisa y lo aventó al sillón próximo, su fuerza había aumentado cada vez que se enojaba.
La agarre por atrás y junte sus manos en su estomago.
Tranquilízate.- le dije en su oreja
Que pasa?.- pregunto artemis confuso


Gabriel:


Pasa que tu no tienes cerebro.- le escupí artemis.- no te permitiré que mandes a Sebastián a su muerte.
De que estas hablando Gabriel.- exclamo artemis nervioso
Estoy hablando de que tu lo estas mandando a tu su muerte, si es que cruza la puerta.- grite estaba furiosa
Nadie, me quitaría a Sebastián de mi lado, antes tendrían que pelear conmigo.
Sebastián estaba queriéndome refrenar agarrándome por atrás para que no golpeara a artemis, pero estaba furiosa y solo me calmaba cuando estaba conmigo.
Todos aparecieron rápido en la entrada del estudio, algunos tenían las armas listas y otros solo estaban asustados por lo que veían.
Quiero que te calmas Gabriel no lo voy a mandar a ninguna lado lo prometo pero tenemos que hablar.- exigió artemis
Si te metes con el, te juro que se me va olvidar quien eres artemis y juro que si intentas engañarme estar muerto al siguiente minuto.- lo amenace
Gabriel por favor.- exclamo Sebastián en mi oreja
Me calme lo mejor que pude y poco a poco me estaba soltando Sebastián pero aun sentía su boca en mi oreja diciéndome que me calmara.
Hablemos todos siéntanse.- exclamo artemis
Yo me senté a lado de Sebastián el no soltaba mi mano y nunca dejo de mirarme.
Artemis se fue a su escritorio estaba asustado podía oler su miedo.
Te cambiaron tus ojos.- me dijo Sebastián con voz picara
Volteé a verlo confundida.
Tu ojos se ponen rojos cuando te enojas.- hablo Sebastián riendo
Se me ponen rojos?.- pregunte alarmada
Es algo de tu cambio.- hablo artemis
Volteé a verlo aun estaba enojada con el, pero mas relajada primero teníamos que hablar y luego enojarme si era necesario.